La religión, en simple.

De vez en cuando, uno navega por Internet y se encuentra con barbaridades tan absurdas que pueden pasar por verdades, sobre todo cuando se les aplica el cristal de la lógica de algunas creencias, religiosas o no.

Y de aquí, niños, salen conversaciones que nunca podréis vincular a la seriedad de un padre, aunque sea el vuestro.

I: Entonces, Jesús es un velociraptor porque la biblia no dice lo contrario.
E: Si Jesús es un velociraptor, entonces Dios, ¿qué era?
I: ¡Pues un velociraptor!
E: Ya, pero si Dios nos hizo a su imagen y semejanza, entonces ¿nosotros no deberíamos ser velociraptores también?
I: No, porque dios puso ahí los fosiles para que nosotros pensaramos que los velociraptores tenían esa forma.
E: Pero los huesos de los velociraptores no se parecen a los nuestros, ¡asi que Dios no puede ser un velociraptor!
I: Sí que puede, ¡porque es Dios!
E: Entonces si Dios puede tomar diferentes formas, ¿cual es la imagen y semejanza que tenemos nosotros?
I: Pues la del humano, no la del raptor.
E: ¿Y su hijo?
I: La del velociraptor.
E: Ya, entonces ¿la paloma mensajera cómo lo hizo? Le envió un mensaje para encontrarse con un velociraptor al que tirarse y ella acepto encantada, ¿no?
I: ¡No! ¡La paloma mensajera se la metió a María!
E: Y salió un velociraptor...
I: ¡Claro! ¡La paloma se tiró a la humana y salió un velociraptor!
E: Entonces, estás diciendo que un ave se tiró a un mamífero y salió un reptil...
I: ¡Claro! ¡Como el ornitorrinco!
E: Entonces ¿Jesús es familia del ornitorrinco?
I: ¡No! Joder, no es tan difícil, ¡Jesús es un Velociraptor a imagen y semejanza de su padre!
E: Pero entonces, ¿Jesús da de mamar a sus crías?

PD: Nunca pretendas que un criminólogo en potencia te explique algo tan absurdo como la religión, acaban saliendo conversaciones de un absurdo inimaginable.